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10 construcciones estúpidas en España
Años y años de despilfarro económico en España han dado lugar a construcciones faraónicas que con la llegada de la crisis terminaron abruptamente. Otras, más afortunadas, fueron terminadas, aunque con un gran sobrecoste. A lo largo y ancho de la geografía española hay decenas de casos, pero probablemente estos 10 sean los ejemplos más paradigmáticos de proyectos que probablemente nunca deberían haber visto la luz.
Rascacielos In Tempo en Benidorm
El edificio residencial más alto de Europa, con 47 metros de altura, necesita dinero. La inversión inicial de 93 millones se ha quedado corta y los promotores tuvieron que parar las obras, ya que necesitan una inyección económica para acabarlo. La mitad de las viviendas ya están vendidas, mientras que los tiempos de finalización se siguen dilatando.
Hotel en la playa del Algarrobico
Playa situada en el Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar. Hay una agria polémica desde el 2003 tras construirse un hotel a pie de playa, vulnerando la Ley de Costas. Tras años de juicios y protestas de asociaciones ambientales, la Junta de Andalucía anunció que iba a adquirir el terreno para demoler el edificio. Las obras en el recinto ya estaban ejecutadas al 94,5% y la inversión superaba los 27 millones de euros.
Ciudad de la Cultura de Galicia
Un complejo de 141.800 metros cuadrados que debía ser un punto de encuentro cultural y de entretenimiento. Sin embargo, nada salió como estaba previsto. Ubicado a las afueras de Santiago de Compostela, con enormes edificios y pocos visitantes, en el año 2013 se pararon definitivamente las obras. La inversión superaba los 300 millones de euros.
Aeropuerto de Castellón
Ejemplo paradigmático del pelotazo del ladrillo. Inaugurado oficialmente en 2011, tras una inversión de más de 150 millones de euros, carece hasta el momento de las certificaciones necesarias para operar y se ha convertido en un recinto fantasma. Los últimos intentos para adaptarlo a la normativa hacen que sea posible que en otoño empiece a recibir vuelos, pero mientras tanto ya son más de 3 años los que lleva completamente parado.
Nuevo Mestalla en Valencia
El objetivo era acabar el nuevo estadio del Valencia en 2009, pero las obras están paralizadas completamente por falta de recursos. El presupuesto era de 344 millones de euros, pero la deuda adicional que tiene el club, de 547 millones, hicieron inviable el proyecto.
Metropol Parasol de la Encarnación en Sevilla
Estructura de madera que cubre la plaza de la Encarnación que ha sufrido una gran polémica desde el principio. Su curiosa estructura (en forma de hongo) y su elevado coste (al proyecto inicial de 50 millones, hubo que sumarle otros 36) no gustan a muchos. Fue inaugurado en el año 2011, tras seis años de obras.
Centro de Creación de las Artes de Alcorcón
Un proyecto faraónico de ocio que consistía en un complejo de 66.000 metros cuadrados, con una inversión prevista de 130 millones de euros. En el año 2012 las obras se pararon ya que eran necesarios 40 millones más para concluir las obras. El lugar, que se quería convertir en un referente en Europa, ahora es un ejemplo de la burbuja inmobiliaria.
Ciudad de las Artes y de las Ciencias de Valencia
Goza de un gran éxito y se ha convertido en uno de los símbolos de Valencia, pero su construcción no estuvo exenta de polémica. El presupuesto era de poco más de 300 millones de euros, pero el coste final se fue hasta los 1.282. Tras agrias controversias y paralizaciones de obras mediante, finalmente en 1998 fue inaugurado L'Hemisfèric y en años posteriores el resto de edificios. El Ágora todavía está en obras.
Aeropuerto de Ciudad Real
La idea era un aeropuerto que liberara de pasajeros Barajas y que estuviese conectado a la red ferroviaria, pero fue un fracaso. Retrasos en los permisos y reticencias gubernamentales echaron al traste con la primera y la no construcción de la estación acabó con la seguda. Fue cerrado en el año 2012 tras unas cifras paupérrimas de viajeros. La inversión había ascendido a los 1.100 millones de euros.
Línea 9 del metro de Barcelona
Este macroproyecto de la línea automática más extensa de Europa (47,8 kilómetros) ha tenido grandes problemas desde el comienzo. La orografía del terreno y la profundidad de los túneles ha provocado retrasos y que apenas nueve paradas (de 39) estén abiertas al público de momento. La idea del Govern es acabar las obras en 2020, hasta el momento la inversión ya supera los 13.500 millones de euros.
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